miércoles, 2 de enero de 2019

Cuántas vidas quedan?

Durante mucho tiempo, llegado el fin de año, mi familia cercana ha hecho reflexiones sobre aquello que hemos aprendido y lo que deseamos para el futuro. Este último año tenía toda la intención de contarles sobre cómo he logrado iluminarme, pero probablemente esa palabra hubiera sido demasiado controversial.

Pero bueno, el caso es que si tuviera que definir este año con una palabra sería precisamente esa: iluminación. Y lo interesante es que a veces uno piensa que la iluminación pertenece a un momento definitivo, a algo que uno busca por años, con maestros, gurús...obtenido después de grandes sacrificios!. Y no, la verdad es que uno puede alcanzarla en cosas aparentemente tan mundanas como un viaje a la tiendita de la esquina o durante un viaje en Uber :)

Por momentos lo olvido, pero la vida me recuerda por n-ésima vez que debo dejar de buscar un momento en particular y en cambio disfrutar de los pequeños momentos y, en particular este año, que no deje de dudar!!:.


Nada se queda,
todo se secará.