Una vez más comprobé que para cada cosa hay un momento y un lugar adecuado para disfrutar en esta vida. Ese sentimiento es una de las cosas por las que bien vale la pena vivir!!.
Esta vez fue mi visita a París. Ya había estado ahí hace unos 3 años, junto con mi hermano y un buen amigo y aunque la ciudad me pareció interesante, no lo fue tanto como para llamarla la mejor ciudad europea en la historia de la humanidad...qué equivocado estaba!.
El ambiente nublado, lluvioso, la música de fondo, los pequeños detalles, el tener la ciudad siempre a media luz, y el tener mucho tiempo y energías para caminar por todos lados creo que fue la mejor combinación para quedar encantado de esta ciudad. Es difícil describirlo, pero cuando algo que creías que ya conocías es capaz de deslumbrarte y dejarte sin palabras, es simplemente impresionante =)...
Quise compartir esto porque también me recuerda a una de nuestras grandes tragedias, que es el ir perdiendo poco a poco la capacidad de asombrarse y de ver las cosas con ojos nuevos. Me recuerda a la confesión que escuché de un jugador experto de go hace muchos años. Este cuate estaba jugando contra un novato y a pesar de ir dándole una paliza, no estaba contento, y nos dijo el porqué. Extrañaba esa sensación de sentirse perdido, de no saber qué jugada exacta debía hacer, envidiaba al novato porque para él, el juego apenas comenzaba, iba a ir descubriendo cada una de las movidas y trucos del juego, pero el jugador experto ya había pasado por ahí y nunca más podría volver a sentirlo, por más que trataba, no podía ver el juego con los ojos y el asombro de aquel novato.
No lo sé, aunque a veces lo olvido, es importante dejar siempre una puerta abierta para tratar de ver las cosas con ojos nuevos y dejarse asombrar, aún por las pequeñas cosas =):.
Avec toi chérie,
la vie est belle.
En horabuena juan... me da gusto que te la pasaste bien ;-)
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